Recibido: 20 de Julio de 2024

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Los autores declaran que no existen conflictos de intereses relacionado con el artículo.

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Aprobado: 23 de Agosto de 2024

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Cómo citar (APA, séptima edición):

Martínez Crespo, A. & Pérez Armas, A.L. (2024). Posición política respecto a Cubade los líderes del 118° Congreso de Estados Unidos. Ad Hoc.5(13), 6 -16.

resumen

Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, después de 1959, han estado marcadas por la falta de voluntad de los sucesivos gobiernos norteamericanos de aceptar la independencia y autodeterminación cubana. El conflicto histórico que de esta situación se deriva ha pautado la política de confrontación mantenida por Estados Unidos hacia la Isla; la cual, en gran medida, tiene su origen en el Congreso. En este último, además de los miembros de los partidos más importantes y los congresistas anticubanos, las posiciones de liderazgo tienen gran relevancia en el establecimiento de la política hacia la nación cubana. En este sentido, el presente artículo se interesa por caracterizar la posición política que mantienen hacia Cuba los líderes del 118º Congreso de Estados Unidos, teniendo en cuenta la influencia que ello puede tener en la relación bilateral entre ambos estados. A partir de la síntesis de los rasgos principales de la posición hacia Cuba de los líderes del 118º Congreso, se constata como tendencia principal una marcada polarización: mientras los líderes demócratas abogan por un acercamiento en varios sectores, los republicanos promueven la implementación de nuevas medidas coercitivas que limiten el desarrollo socioeconómico del estado cubano.

Palabras clave: Estados Unidos, posición política hacia Cuba, Congreso, liderazgo, polarización.

ABSTRACT

Relations between Cuba and the United States, after 1959, have been influenced by the unwillingness of successive North American governments to accept Cuban independence and self-determination. The historical conflict that emanates from this situation has scheduled the policy of confrontation maintained by United States towards the Island; which, to a large extent, has its origin in Congress. In addition to members of the most important parties and anti-Cuban congressmen, leadership positions have great relevance in establishing policy towards the Cuban nation. In this sense, the present work is interested in characterizing the political position held towards Cuba by the leaders of the 118th Congress of the United States (current), taking into account the influence that this may have on the bilateral relationship between both states. From the synthesis of the main features of the position towards Cuba of the leaders of the 118th Congress, a marked polarization is confirmed as the main trend: while the Democratic leaders advocate a rapprochement in various sectors, the Republicans promote the implementation of new measures coercive measures that limit the socioeconomic development of the Cuban state.

Keywords: United States, political position towards Cuba, Congress, leadership, polarization.

introducción

La Rama Legislativa del Gobierno federal de Estados Unidos, según el Artículo I de la Constitución del país, se compone por el Senado y la Cámara de Representantes, que unidos forman el Congreso de la nación. Las principales atribuciones de este órgano se asocian con la aprobación de legislación y políticas; además, el Congreso cuenta con varios instrumentos para ejercer influencia directa sobre decisiones de política exterior, fundamentalmente vinculadas con temas comerciales, procesos migratorios y sanciones (Delgado et al., 2021).

Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, después de 1959, han estado marcadas por la falta de voluntad de los sucesivos gobiernos norteamericanos de aceptar la independencia y autodeterminación cubana. El conflicto histórico que de esta situación se deriva ha pautado la política de confrontación mantenida por Estados Unidos hacia la Isla; la cual, en gran medida, tiene su origen en el Congreso.

El bloqueo económico, comercial y financiero constituye el sistema de medidas coercitivas unilaterales aplicadas por Estados Unidos hacia Cuba que más afectaciones ha provocado al desarrollo de la economía cubana. En cuanto a su composición, debe destacarse que este representa un entramado de leyes, órdenes ejecutivas y disposiciones legales que, en su mayoría, han sido gestadas en el Congreso norteamericano.

Es importante, además, tener en cuenta la influencia que ejercen en la política de Estados Unidos hacia Cuba las acciones de los miembros de los partidos y de los congresistas anticubanos, que históricamente han promovido la intensificación de sanciones hacia la isla caribeña; aunque se ha podido constatar también desde poco después de 1959 la actividad de ciertos congresistas que han defendido el interés de promover los acercamientos a la nación cubana. Por su parte, las posiciones de liderazgo en la Cámara y el Senado norteamericano también poseen gran relevancia en cuanto al diseño de políticas hacia Cuba.

Las posiciones de liderazgo surgieron a finales del siglo XIX y principios del XX, cuando los miembros de los dos partidos principales del país –Demócrata y Republicano- organizados en conferencias partidarias, decidieron escoger líderes para que les representaran en los más importantes debates. Entre las principales funciones de estos estaría coordinar acciones en los plenos de los dos órganos colegisladores y trabajar con el poder ejecutivo en prioridades políticas (United States Senate, s. f.). Hacia el siglo XXI, los líderes de las conferencias partidarias han incrementado su control sobre las agendas del Congreso y ejercen gran influencia para la toma de decisiones.

En el Senado, particularmente, los líderes desempeñan un papel importante en las funciones diarias, incluido el establecimiento de agendas legislativas, la organización de los comités y la determinación de cómo se desarrollan las acciones en el pleno. (United States Senate, s. f.)

La estructura del 118º Congreso de Estados Unidos, que tomó posesión en enero de 2023 y terminará sus labores en enero de 2025, ofrece una leve ventaja a los demócratas en el Senado y una mayoría, también leve, a los republicanos en la Cámara de Representantes (Granma, 2023). Esta dinámica en el Congreso, unido a las posiciones de liderazgo, ha tenido incidencia en el tratamiento del tema Cuba a lo interno del Legislativo y en la conformación de nuevas políticas y estrategias estadounidenses. Por tanto, el estudio de la correlación de fuerzas en los dos órganos colegisladores norteamericanos, así como la revisión de los perfiles de los líderes en ambas cámaras posee gran importancia para el Estado cubano.

En correspondencia con lo planteado anteriormente, el presente trabajo tiene como objetivo general: caracterizar la posición política que mantienen hacia Cuba los líderes del 118º Congreso de Estados Unidos. Para su cumplimiento han sido definidos como objetivos específicos: sintetizar los principales aspectos relacionados con Cuba referidos por los líderes del Senado del 118º Congreso de Estados Unidos en intervenciones públicas, sintetizar los principales aspectos relacionados con Cuba referidos por los líderes de la Cámara de Representantes del 118º Congreso de Estados Unidos en intervenciones públicas y describir los rasgos de la posición política hacia Cuba de los líderes del 118º Congreso de Estados Unidos.

Las intervenciones públicas de las cuales se tomaron los aspectos para definir las posiciones políticas se encuentran disponibles en las páginas oficiales de los senadores y representantes objetos de estudio, las cuales fueron debidamente referenciadas. Para el análisis de las tendencias se valoraron todas las alusiones registradas en las páginas referidas, y no únicamente los pronunciamientos que han tenido lugar durante el período legislativo 2023-2025.

desarrollo

El 118º Congreso de Estados Unidos tomó posesión el 3 de enero de 2023, luego de las elecciones intermedias de noviembre de 2022. Este ejercerá sus funciones hasta enero de 2025.

Actualmente los demócratas tienen el control del Senado, pues obtuvieron 51 escaños frente a los 49 Republicanos. En la Cámara de Representantes, los republicanos obtuvieron una ganancia neta de nueve escaños frente a los demócratas (CNN, 2023). En correspondencia con ello, el Líder de la Mayoría en el Senado pertenece al Partido Demócrata e igual posición en la Cámara de Representantes es ocupado por un Republicano.

Tratamiento del tema Cuba por los líderes del Senado en el 118º Congreso de Estados Unidos

La mayor parte de los líderes del Senado norteamericano han hecho referencias públicas a Cuba en diferentes momentos de sus carreras legislativas, pero sobre la base de diversas perspectivas. El estudio de sus pronunciamientos permite establecer una tendencia en cuanto a su posición política hacia la Isla.

Respecto del sector agrícola, las senadoras demócratas Debbie Stabenow y Amy Klobuchar han sido las que mayor cantidad de referencias han hecho al tema de intercambios con Cuba como posibilidad real e importante que ofrecería beneficios a ambos estados. Los principales aspectos que han intentado potenciar son el aumento de los intercambios entre agricultores cubanos y empresas estadounidenses y la eliminación de las restricciones a la financiación privada de las exportaciones agrícolas estadounidenses. Resulta relevante la gran capacidad para establecer coaliciones bipartidistas en el órgano legislativo que distingue a las dos líderes del Senado referidos y, en el caso de Stabenow, su posición, teniendo en cuenta que se desempeña como presidenta del Comité Senatorial de Agricultura, Nutrición y Silvicultura en el Congreso.

Sobre el tema de la inmigración cubana en el territorio norteamericano, los líderes del Partido Demócrata que han realizado alusiones a Cuba son las senadoras Elizabeth Warren y Tammy Baldwin. Sus acciones principales han estado dirigidas a la reducción de restricciones de asilo para los cubanos –junto a haitianos, venezolanos y nicaragüenses- que arriban a las costas estadounidenses y a la promoción de políticas que autoricen a estos a acceder a puestos laborales.

Sobre la senadora Elizabeth Warren se debe tener en cuenta la postura que mantuvo hacia Cuba durante la pandemia de COVID-19, pues no impidió los envíos de equipos médicos y recursos a la nación cubana, acción que marca una diferencia considerable frente a la política de Gobierno de arreciar el bloqueo económico en este período.

Varios líderes demócratas del Congreso estadounidense actual han expresado en intervenciones públicas su disposición de favorecer los intercambios comerciales con Cuba, teniendo en cuenta los beneficios que ello pudiera aportar para ambas naciones. La funcionaria más reconocida por esta posición es Amy Klobuchar, quien ha defendido el mantenimiento de relaciones económicas y políticas, desde la perspectiva de los beneficios que ello aportaría para la seguridad nacional de Estados Unidos.

Teniendo en cuenta el interés de flexibilizar las relaciones con Cuba, Klobuchar ha referido en el Congreso la necesidad de eliminar el bloqueo económico contra el estado caribeño. Su interés se fundamenta en las posibilidades de intercambio que ello abriría y que, a su vez, generarían oportunidades de desarrollo económico para los dos países. De acuerdo con estas aspiraciones, también ha sido crítica de las políticas de Donald Trump –mantenidas por Biden- que recrudecieron las acciones del Gobierno estadounidense contra Cuba y que representaron un retroceso respecto de la política desarrollada por Barack Obama. Para Cuba estas acciones resultan muy positivas teniendo en cuenta las intenciones de intercambio en diversos sectores que estos congresistas también promueven.

Es válido destacar que Klobuchar, presidenta del Comité Directivo del Partido Demócrata en el 118º Congreso, también elaboró dos proyectos de legislación (2016 y 2021) con apoyo bipartidista para levantar el bloqueo impuesto a Cuba. Además, ha promovido los intercambios educativos y culturales entre ciudadanos de ambas naciones y ha criticado en reiteradas ocasiones las medidas de restricción de viajes aéreos comerciales de Estados Unidos hacia Cuba, así como la arbitraria inclusión de esta última en la lista de países patrocinadores del terrorismo.

En contraposición con las posibilidades de acercamiento, varios miembros actuales del liderazgo del Senado rechazan un incremento de la relación bilateral Cuba-Estados Unidos y defienden el principio de obstaculizar todo intento legislativo que pudiera generar una apertura para los intercambios.

Como tendencia, estos líderes se unen a las iniciativas legislativas de los senadores anticubanos Bob Menéndez y Marco Rubio, que promueven el apoyo al “Movimiento Pro Democracia De Cuba”1 y que han logrado presentar ante los órganos colegisladores iniciativas bipartidistas. En este sentido destaca la líder Vicepresidenta de Divulgación del Partido Demócrata Catherine Cortez Masto, que se ha unido a varios proyectos de ambos senadores.

En relación con lo anterior, también destaca el caso del senador demócrata Mark Warner, quien se desempeña como Vicepresidente de la Conferencia partidaria en el 118º Congreso. Warner realizó una visita a Cuba en 2015 para explorar oportunidades comerciales entre la isla caribeña y Virginia, estado por el que se desempeña como senador y también había explicado anteriormente la necesidad de eliminar las sanciones económicas y diplomáticas estadounidenses que han limitado durante décadas los intercambios bilaterales. Sin embargo, desde 2023, ha recibido la influencia de los senadores anticubanos y se ha aliado a las posiciones más coercitivas, que son justificadas con la supuesta amenaza para la seguridad nacional estadounidense que representan Cuba, Venezuela, Rusia, China e Irán.

Otra de las estrategias mantenidas por los líderes opuestos a cualquier acercamiento al Estado cubano –en su mayoría republicanos- es la crítica constante a la gestión de los demócratas, y particularmente a la de Biden, por “no mantener posturas lo suficientemente fuertes contra el socialismo de China, Cuba y Venezuela”.

En los casos de Mitch McConnell, líder de la minoría en el Senado; John Barrasso, tercer miembro de mayor rango en el liderazgo republicano del Senado como presidente de la Conferencia Republicana y John Thune destacan sus alusiones a Cuba –y sus relaciones con China y Rusia- como un “gran peligro” para la seguridad nacional de Estados Unidos. Asimismo, defienden la supremacía norteamericana como “garante universal de la democracia” y utilizan con perspicacia diversas herramientas para moldear la opinión pública internacional respecto de sus intereses. En el Comité de Agricultura, McConnell y Thune representan posiciones antagónicas a la de la Demócrata y Presidenta del Comité Debbie Stabenow, pues se oponen a toda posibilidad de intercambio agrícola con la nación caribeña.

La interrupción de todos los posibles intercambios comerciales también constituye un asunto clave para los líderes del Senado norteamericano referidos anteriormente. En este sentido, la prohibición de la exportación de petróleo hacia Cuba, con el objetivo de limitar las capacidades de desarrollo económico, es uno de los tópicos más abordados en los proyectos legislativos.

Otro de los temas más referidos en torno a Cuba desde las posiciones de liderazgo conservador es la supuesta necesidad de apoyar a la población cubana que “debió movilizarse el 11 de julio de 2021 por la vulneración de la democracia y los derechos humanos en el país”. En este sentido, destacan las intervenciones de senadores con reconocida influencia bipartidista como Joni Ernst, Shelley Moore Capito y Mitch McConnell, que han apoyado al senador anticubano Marco Rubio y sus colegas en la presentación de resoluciones contra Cuba.

En el caso de la senadora republicana Capito, también se le asocia con proyectos legislativos encaminados a “incrementar” la seguridad fronteriza norteamericana ante la presunta amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos que representa la inmigración de ciudadanos cubanos.

Tratamiento del tema Cuba por los líderes de la Cámara de

Representantes en el 118º

Congreso de Estados Unidos.

La toma de posesión del 118º Congreso marcó el comienzo de una nueva generación de liderazgo para los demócratas de la Cámara. El representante Hakeem Jeffries, de Nueva York, asumió como líder del partido, Katherine Clark, de Massachusetts, como látigo demócrata, y Pete Aguilar como presidente del caucus (Granma, 2023). Sobre estos líderes destaca la no referencia a Cuba en sus declaraciones.

En cuanto a las demás posiciones de liderazgo de la Cámara, también resulta relevante la escasa atención ofrecida al tema Cuba dentro del Congreso. En este escenario, las referencias más importantes provienen de los líderes del Partido Republicano, centradas principalmente en la emigración cubana y la crítica al socialismo.

Mike Johnson y Elise Stefanik, ambos representantes republicanos, han enfatizado “la difícil situación de los cubanos que huyen de la isla” y han criticado el socialismo como “ideología fallida”. En este sentido, Mike Johnson cataloga la emigración como una catástrofe humanitaria y ha hecho alusión a presuntas manipulaciones a la burocracia federal hechas por el presidente Joe Biden para abrir las fronteras a los inmigrantes ilegales. Por su parte, Elise Stefanik, ha referido “la necesidad de aceptar la emigración por mar”, la cual había sido rechazada por el presidente Biden. Asimismo, la republicana condena brutalmente el “régimen cubano”.(House Republican Conference, s. f. ; Meet Mike Johnson - Speaker Mike Johnson, s. f.)

El líder de la minoría, Steve Scalise, ha calificado al gobierno como un “fracaso del socialismo” y ha condenado su historial de derechos humanos. En enero de 2023, Steve se unió a la congresista anticubana María Elvira Salazar en la presentación de una resolución que refleja su perspectiva.

Sin embargo, dentro de la Cámara de Representante existe un pequeño grupo que favorece un enfoque más conciliatorio hacia Cuba. Uno de los principales líderes de este segmento es el representante Tom Emmer. El republicano presentó un proyecto de ley en 2015 para eliminar el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba. En 2017, desarrolló la Ley de Comercio con Cuba, la cual facilitaba la inversión de empresas privadas en la Isla. Además, se opuso a la postura de retroceso de Donald Trump acerca de los intercambios con la nación caribeña.

Principales rasgos de la posición de los líderes del 118º Congreso de Estados Unidos hacia Cuba

La tendencia principal del liderazgo actual del Congreso de Estados Unidos en su posición hacia Cuba es la polarización. Mientras la mayoría de los líderes demócratas abogan por un acercamiento que beneficie a ambas partes, la mayoría de los líderes del Partido Republicano apuestan por recrudecer las sanciones e incrementar la hostilidad hacia el Gobierno cubano, aludiendo, incluso, al peligro para la seguridad nacional estadounidense que cierta proximidad pudiera acarrear. En este escenario, las estrategias para encaminar sus políticas presentan ciertas diferencias, mientras los líderes demócratas utilizan las declaraciones como herramienta principal para promover los intercambios, los sujetos más conservadores emplean instrumentos más fuertes como proyectos legislativos particulares y la propia obstaculización de las intenciones de acercamiento.

En relación con los intentos de incrementar la relación bilateral, provenientes en su mayoría de los líderes demócratas del Senado, destaca el reconocimiento de posibilidades para establecer vínculos en los sectores agrícola, comercial y de seguridad fronteriza; así como la promoción de intercambios con nuevas formas de la economía cubana y en los ámbitos migratorio, educativo y cultural. En este sentido, resulta muy relevante el hecho de que congresistas que lideran las conferencias partidarias introduzcan en los debates asuntos como la necesidad de eliminar el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba y de excluir a la nación caribeña de la lista de países patrocinadores del terrorismo.

Por otra parte, las posiciones políticas en contra de un acercamiento entre los dos estados y críticas del gobierno de la nación caribeña se asocian fundamentalmente a líderes republicanos de la Cámara de Representantes. Ello se corresponde con la tendencia histórica, y en el 118º Congreso, que posee una mayoría republicana, esto no facilitará las relaciones entre los dos estados.

Los líderes demócratas de la Cámara, que representan en este órgano el Partido de la minoría, no han tratado abiertamente el tema Cuba en sus declaraciones. Su escasa atención al asunto pudiera estar relacionada con la baja prioridad del tema entre los votantes demócratas o la falta de unidad en el Partido acerca de cómo abordar la cuestión.

Finalmente, se reconoce que las posiciones contra Cuba en el Congreso norteamericano están influenciadas, en gran medida, por la labor de los senadores y representantes anticubanos. Estos han empleado dos argumentos básicos para justificar los ataques y limitaciones económicas impuestas al estado cubano. Por una parte, “el fracaso del sistema socialista” y, por otra, el supuesto peligro que representa para la seguridad nacional de Estados Unidos las relaciones de Cuba con China y Rusia, las cuales –según los congresistas norteamericanos- constituyen una amenaza, pues se utiliza la Isla como enclave para trazar y poner en marcha estrategias contra el Gobierno estadounidense.

conclusiones

El estudio de las posiciones políticas hacia Cuba de los líderes del 118º Congreso de Estados Unidos revela las siguientes conclusiones:

La tendencia fundamental en cuanto al tema Cuba en el 118º Congreso es la polarización. El liderazgo republicano defiende el recrudecimiento de la política hacia la Isla y la implementación de nuevas medidas coercitivas mientras los líderes demócratas asumen posiciones que tienden al acercamiento entre ambas naciones.

Los líderes del Senado en el 118º Congreso de Estados Unidos mantienen dos posiciones bien definidas respecto del tema Cuba: los que apoyan el acercamiento a la Isla para promover los intercambios en beneficio de ambas partes y los que rechazan las políticas dirigidas a incrementar la relación bilateral e influyen para ampliar la hostilidad contra el estado cubano.

El tema Cuba ha recibido una atención limitada por parte los líderes de la Cámara de Representantes en el 118º Congreso de Estados Unidos. La mayor parte del liderazgo republicano de este órgano que posee una posición política bien definida respecto del tema se asocia con posturas críticas al Gobierno cubano, centradas en la emigración, el fracaso del socialismo y la necesidad de aplicar medidas “duras” contra la Isla. Por su parte, los líderes demócratas de la Cámara han permanecido en gran medida silenciosos sobre el tema.

referencias

bibliografía

notas

  1. Iniciativa impulsada por congresistas anticubanos en contra del Gobierno y el pueblo de la Isla. Su objetivo, en última instancia, es promover la desestabilización del orden político en la nación cubana.z